Hay muchos insectos que nos ayudan, algunos nos molestan y otros son simplemente peligrosos. Podemos aprender mucho de la observación de los insectos.

 

¿Qué se necesita?

Una lupa, un anotador y lápiz.

 

¿Qué hay que hacer?

Salí al jardín o a la plaza y quedate sentado observando un rato. Si ponés atención, vas a descubrir muchos insectos a tu alrededor. Por ejemplo, las hormigas… ¿Cómo son? ¿Hacia dónde se dirigen? ¿Van en grupos? ¿Van solas? ¿Podés descubrir dónde está el hormiguero? ¡Cuidado con tocarlo! ¿Hay algún nido cerca? ¿Y en las plantas? ¿O en los rincones? ¿Podés encontrar alguna tela de araña?

Recolectá toda la información en tu anotador y luego compartila con tus compañeros. ¿Qué diferencias y semejanzas encuentran?