Desde su institución como feriado nacional y jornada de concientización, en 2002, cada 24 de marzo se organizan múltiples movilizaciones y asambleas en distintos puntos del país, en recuerdo de las víctimas de la última dictadura militar y en defensa de los derechos humanos.

Las actividades son organizadas por entidades con marcada representación en los derechos humanos de la Argentina, entre las que se destacan las Abuelas de Plaza de Mayo, las Madres de Plaza de Mayo, la Línea Fundadora de Madres de Plaza de Mayo y la asociación H.I.J.O.S. Los actos centrales acostumbran a desarrollarse en la emblemática Plaza de Mayo, en el centro de la Ciudad de Buenos Aires, aunque también se celebran en el Espacio para la Memoria y Derechos Humanos, donde entre 1976 y 1983 funcionó el centro de detención clandestina conocido como ESMA.

Al tratarse de una jornada tendiente a la toma de consciencia sobre la trascendencia de los derechos humanos y la defensa de los valores democráticos como sistema de gobierno, los actos no convocan banderas políticas ni se pronuncian discursos partidarios.

Dado el peso histórico de la fecha –y la trágica estadística de que cientos de estudiantes de la Secundaria fueron desaparecidos por el gobierno de facto-, durante la semana del 24 de marzo, en las escuelas se propone a los docentes organizar actividades individuales o colectivas de carácter revisionista, en rechazo a las antiguas prácticas de sometimiento ideológico y en defensa de todos los derechos humanos.